Las sedes de las instituciones gallegas, al igual que las ‘casas’ de los partidos políticos, permanecen casi vacías desde hace una semana, cuando el Gobierno central decretó el Estado de Alarma por el avance del coronavirus. Sin embargo, la actividad de la política no ha cesado en los siete primeros días de una crisis sin precedentes que ha provocado otra situación inédita en la historia de la Comunidad Autónoma y de todo el Estado: la suspensión de unas elecciones, las previstas para el 5 de abril, que ahora estarían viviendo los primeros compases de la campaña.
vía Europa Press – Resultados de búsqueda