La presidenta de la República de Brasil, Dilma Rousseff, ha indicado al Papa Francisco que se enfrentan a un enemigo común, “la desigualdad en todas sus formas”, y ha manifestado su preocupación por la crisis económica mundial para recordar a “los pobres y los jóvenes, las principales víctimas del desempleo”.
vía Europa Press – Resultados de búsqueda