NUEVA YORK (Reuters) – En un estudio realizado en Estados Unidos sobre 600.000 mujeres, cada una con más de un hijo, se registró una disminución de la duración del embarazo y un aumento de los partos prematuros entre los bebés concebidos en mayo. La mayoría de esos niños nació en plena temporada de gripe en el hemisferio norte, al comienzo o durante el invierno boreal. “Al organizar los datos en el tiempo, se ve que existen patrones estacionales”, dijo el coautor del estudio, Hannes Schwandt, de la Princeton University, en Nueva Jersey. …
vía Noticias de Salud – Yahoo! Noticias