(Reuters) – Las restricciones contra el tabaco entraron en vigor el sábado en Rusia y con ellas el presidente Vladimir Putin espera que mejoren las condiciones de salud de la población y revertir el declive demográfico, pero se enfrenta a una fuerte oposición en un país donde cuatro de cada diez personas fuman. Las medidas, que forman parte de una ley que Putin firmó en febrero, incluyen la prohibición de fumar en colegios y universidades, museos, complejos deportivos, hospitales y transporte público – lugares en los que, en muchos casos, ya está vetado. …